Feliz Navidad, con regalo de Cubitorah

No es caca.

Era la noche antes de Navidad…

Finalmente, tras seis décadas de mala alimentación, hedonismo y metanfetaminas, las arterias llaman a la puerta de Santa Claus, en forma de ultimátum cardiovascular: «No más tours mundiales en trineo por Navidad, señor Claus», según el profesional sanitario (Shashikant Prakash MD, del Mount Sinai Hospital NY).

Pero, ¿qué va a ser de los niños? No los niños pobres, esos no iban a tener regalos igualmente, pero ¿qué pasa con todos esos niños de clase media y alta, cuando despierten y vean que su árbol no está rodeado de todas las mierdas que han marcado con el «Me lo pido» en el catálogo de El Corte Inglés? ¿Quién va a aguantar sus rabietas y pataleos? ¿Es que a nadie le importan esos abuelos o la nanny filipina?

Mientras saca una pirula de meta para alejar la tristeza, Santa recuerda a un viejo amigo que le puede ayudar a salvar la Navidad.

―¿Aló?

―¡Cubitorah, viejo amigo!

―¿Santa? Joder viejo, te creía muerto desde 1988.

―Ho ho ho, me lo dicen mucho, debe ser un efecto Mandela.

―¿Me estás llamando negrata?

―Ho ho ho, ¡cómo te echaba de menos, Cubi! Pero me temo que no es una llamada de cortesía, tengo un gran problema que solo tú puedes ayudarme a solucionar…

Tras una breve negociación en la que Cubitorah se asegura inmunidad para reducir a cenizas una ciudad centroafricana a elegir, los dos amigos llegan a un acuerdo para la logística de reparto de regalos.

¡La Navidad estaba salvada! Pero el estilo de Cubitorah a la hora de repartir los regalos difiere mucho del de Santa Claus o el repartidor de Amazon. El lagarto radiactivo no se desliza grácilmente por la chimenea para dejar amorosamente el paquete bajo el árbol, ni estruja el paquete hasta que quepa en el buzón. No, Cubitorah destroza tu ventana con el rabo (no necesariamente con la cola) y lanza el regalo hacia adentro con desdén, como el niño de Paperboy lanza el periódico desde 25 metros.

Así que, desde hoy, día de Navidad, mirad todos bajo vuestro árbol y encontraréis un magnífico regalo en forma de link de parte de vuestros amigos de Gamerah.

https://gamerah.bandcamp.com/

¡Radio Cubitorah vol.1! Un álbum doble con (casi) todos los éxitos que habéis podido escuchar en Gamerah de noche cada semana, divididos en «CD1: The Originals» y «CD2: The Covers». ¡Totalmente gratis! «Gamerah Coneccion Latina», «No digas puta Sony», «Seguero» (las 8 canciones con ese título), «Horizontes» o «Mega-naste el corazón», ¡están (casi) todas!

Los podéis escuchar en streaming en la página de bandcamp o los podéis descargar desde allí mismo para grabarlos en un CD Princo y poder disfrutar de «Pingavieja», «Gameflus» o «El Baile del Zurullo» allá donde vayáis en vuestro discman o el reproductor de CD de vuestro Hyundai Coupé.

Además, por tiempo limitado, incluye el EP navideño «The Xmas EP», con los villancicos que pudisteis escuchar en la 36ª gala de juegos (de mierda) del año, para que las podáis poner en las reuniones familiares, para goce y estupefacción de niños y abuelos.

¡Feliz Navidad! ¡Y que os den por culo!

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