De toda la vida del señor, el Tokyo Game Show ha sido un evento del que podíamos esperar cualquier cosa, desde juegos de móviles que no le importan a nadie a juegos de toros que … tampoco importan a nadie, pero que nos pueden hacer más o menos gracia por «el impacto cultural».
Como es tradición, parte de la redacción de Gamerah ha tenido a bien desplazarse a Tokio para traeros lo más interesante del evento, y en este 2023 parece como si todos se hubiesen puesto de acuerdo para que estuviera hasta arriba de juegos de dudosa calidad (dudosa porque no sabes cómo definirla). Aquí os hablamos de esos juegos de los que no os hablará casi nadie.
A la pluma: Narg
Snow Bros Wonderland
Segundo Wonderland que reseño en Gamerah… ¿o era Wonderworld? Las similitudes no acaban ahí, porque este juego es muy Balan. Buenas intenciones, simpático, pero el resultado es peor que la suma de sus partes. Por poner un ejemplo, mirad fijamente a los ojos a estas dos adorables criaturas.
El Snow Bros Wonderland es un poco así también. La mecánica de encerrar enemigos en bolas de nieve y mandarles rebotando por la pantalla es tan divertida como siempre, pero la novedad se acaba rápido porque no funciona tan bien en un plano 3D como en el 2D original, donde había gravedad y plataformas que marcaban el camino. Las bolas desaparecen a los pocos rebotes en zonas donde no tiene mucho sentido (ni recompensa) planear una estrategia de ataque. Los mapas se estructuran con un pesado paqui pallá de teletransportadores que no aportan nada, y el jefe de la primera pantalla tampoco lo salva, haciéndose largo y aburrido. Me da pena decirlo, porque la gente del stand de Tatsujin era muy maja (luego Naeval os hablará más de ellos), pero la primera impresión con esta demo es que es un juego mucho peor que el original. No aporta ideas jugables que justifiquen una continuación, no lo salva la estética, ni el valor de producción, ni nada en realidad. El nivel, lamentablemente, es de indies novatos probando cosas, y no de una empresa establecida.
Ojalá le den una vuelta. O dos o tres.
Rushing Beat X
Yusepón y yo somos los beat’emuperos de Gamerah. Hay más redactores que juegan a los yo contra el barrio en la web (y sobre todo en el podcast), pero como no tienen gusto vamos a ignorarlos amablemente. El caso es que me vi obligado a probar este Rushing beat X para dar mis educadas impresiones. Es… digno del título de esta feature. Aunque tiene todos los elementos del género, todo funciona mal, todo carece de gameflus. Han hecho todo, como digo, excepto lo más importante: que de gusto pegar, que sea divertido, que el movimiento de los personajes sea agradable.
Si el Snow Bros era como un juego hecho por indies novatos probando cosas, este parece un juego hecho por indies con experiencia pero que no tienen ni idea del género.
Genjitsu no Yohane: BLAZE in the DEEPBLUE
A este le tenía ganas. De Inti Creates, gente con experiencia en las 2D, y con la licencia de Love Live!, Genjitsu no Yohane (Yohane the Parhelion) prometía ser un agradable metroidvania, un pasatiempo divertidillo y sin ambición basado en una serie de televisión. Mi experiencia con la demo es que es incluso menos que eso. Parece un juego hecho con la plantilla, lo mínimo para pagar los sueldos y es que oye, hay que comer (y yo lo entiendo). Su juego anterior, Grim Guardians, ya era un pelín decepcionante, pero al menos tenía aspectos interesantes y probaba cosas diferentes. Este es (según lo que he visto en la demo, al menos) poco más que una plantilla de metroidvania con los assets cambiados (y horribles pixelotes) para que se adecúe a la licencia de Love Live!.
Es una lástima, porque iba con intención incluso de comprarlo, pero la demo me ha quitado todo el interés.
Si el Snow Bros era como un juego hecho por indies novatos probando cosas y el Rushing Beat X era como un juego hecho por indies con experiencia pero que no tienen ni idea del género, este Genjitsu no Yohane parece un juego hecho por gente con experiencia, pero que están tan hartos ya de hacer siempre lo mismo que pasan de todo.
Motesolo
Pe… pero qué es esto. Es tróspido incluso para Japón. Motesolo («moteru» significa «tener éxito con el sexo opuesto» en japonés), con el subtítulo «No girlfriend since birth»… ¿y en la Nintendo Switch?
A la pluma: Naeval
Tatsujin Extreme
Empezamos con algo fuerte. Tatsujin son dos cosas. Lo primero es una empresa, que ha sido comprada por el grupo Embracer (N. del E.: aunque visto lo visto probablemente no le quede mucho ) y que se encarga de distribuir los juegos de la antigua Toaplan. O, al menos, de encontrar empresas que puedan hacer versiones.
Por otro lado, es la versión japonesa del juego Truxton, el primer juego que tuvo una nota absolutamente ilógica en la primera Hobby Consolas (¡un 94 sobre 100!). Pues Tatsujin Extreme, si por un casual aparece analizado en dicha revista, no se va a llevar esa nota ni de broma. Una versión con gráficos poligonales pero jugabilidad bidimensional que podría pasar por uno de esos SEGA AGES 2500 de Playstation 2, pero tres generaciones después. Lo mejor es el cómic que te regalan.
Kage: Shadow of the Ninja
Este es bueno… e inesperado. Blue Shadow, que es como se conoce por estas tierras a Yami no Shigotonin Kage (Kage the Dark Operative), es un juego de NES a la sombra de Shadow Warriors o Ninja Gaiden, desarrollado por Natsume y con dos secuelas: Shadow Warriors de Game Boy (sí, no es broma) y Return of the Ninja, de Game Boy… Color. Pues después de esto, y de sacar los remakes de Wild Guns y Ninja Warriors Again, el mismo equipo ha decidido que era un buen momento para sacar un remake de Blue Shadow, y lo cierto es que es increíble. Muchas ganas de que salga y lo pongamos fino aquí.
Cygni
Una pequeña decepción. Cygni es un matamarcianos de Konami con un aspecto visual increíble (imaginad Mass Effect pero en matamarcianos), y mientras esperaba en la cola me parecía la pera limonera. Pero fue ponerme a los mandos, ver que el refresco de la jugabilidad iba fatal, y dejarlo pensando que ojalá cuando salga en nuestras casas esté arreglado. Una verdadera lástima, la verdad.
Herebeke’s 2
Herebeke es como se conoce en Japón al juego Uforia: The Saga, ese juego que en España no llegó al 7 de 10 de la principal revista de entonces, pero que se ha convertido en uno de los juegos más caros de NES, porque… la gente hace cosas muy raras. Tengo que decir que lo poco que pude jugar de la secuela me pareció muy interesante. Un aspecto gráfico que me recuerda al último juego de Yoshi, un buen control, y unos personajes muy majos. Veremos si al final sigue siendo uno de los buenos.
Formation Z
Otro retorno inesperado, y como se espera de el título de este artículo, bastante malo. El Formation Z original es un juego de Jaleco que salió originalmente para arcades, y luego apareció en MSX y NES, siendo igual de flojo o más que la versión de recreativas. Pues a pesar de todo esto, a alguien le ha parecido que hacer un remake de este juego es una buena idea, y allí han ido los de City Connection (los herederos de Jaleco, usando el nombre de uno de sus juegos más queridos) a hacer un matamarcianos en el que somos un robot y una nave que tiene un sistema de control algo curioso (no asciendes y desciendes como en casi todos los horizontales, sino que subes y bajas el morro, permitiendo apuntar en diagonales, pero a la par ofreciendo mucha más zona de impacto a las balas enemigas). Me pareció muy insípido y poco inspirado, la verdad.
Final Exerion
Otro regreso inesperado de una propiedad intelectual de Jaleco. El primer Exerion es un matamarcianos vertical muy sencillo, en la línea de Space Invaders o Galaxian, pero un poco más avanzado. Ahora se han unido a la buena gente de Happy Meal para hacer esta siguiente parte, que es algo más trabajada, pero que no llega a alcanzar ni de lejos a ninguno de los matamarcianos verticales de cierto éxito.
Angelian Trigger
Es innegable que a la gente de Pixel, con sus Horgihugh e incluso su Enryuu Seiken Xiao-Mei (que es mucho más floijto pero que tiene versión de Mega Drive en desarrollo), les tenemos mucho cariño. Y este Angelian Trigger es un buen ejemplo de por qué. Un homenaje a Space Harrier con personalidad y buen hacer, que por lo poco que he podido jugar se maneja muy bien, y que hay que ver si aguanta en partidas largas.
Cotton Fantasy 2
Otra sorpresa. La saga Cotton desapareció de la faz de la tierra tras su entrega de Dreamcast (que por cierto, también estaba en la feria en versiones para dispositivos más modernos), pero desde hace años ha vuelto con una fuerza inusitada a pesar de no hacer unas ventas muy allá. El reciente Cotton Fantasy es un buen matamarcianos horizontal, y este Cotton Fantasy 2, hecho por la misma gente, tiene pinta de ir por los mismos derroteros. Y nosotros espramos disfrutar de ello.
Kamikaze Lassplanes
Una mezcla de novela visual con matamarcianos horizontal por la que no daba un duro antes de echar una partida… y lo cierto es que de calidad me recuerda más a cosas como Sine Mora que a un matamarcianos flojete. La demo me la jugué entera y me lo pasé pipa, la verdad.
Hotel Barcelona
Dejo este para el final porque es posiblemente la cosa más loca y sinsentido de todo el Tokyo Game Show. Está dirigido por Suda51 y mi adorado Swery, y además con ese nombre, pero realmente es un juego de acción de desplazamiento horizontal mezcla de hack’n slash y plataformas. Puede que sea lo más increíble del planeta o no, pero sinceramente, yo me he ido de ahí sin entender nada.
Siento unas irrefrenables ganas por jugar alguno. De malo, malo, hace bueno. Los Cotton, alguno caerá para Switch.